viernes, 28 de diciembre de 2012

Calzones rojos o amarillos? y otros ritos mas...

El año pasado les comenté que hicimos en la oficina intercambio de calzones (tangas, cacheteros, bikinis, lo que cada quien use) y cada quien elegia si deseábamos rojos o amarillos...Yo pedí un amarillo y el mero dia se me olvidó ponérmelo!.Dice la tradición que el amarillo se usa para atraer dinero y el rojo para atraer el amor...El asunto es que este año, en la oficina no querian volver a organizarlo porque dijeron las malas lenguas que solo A MI me habia funcionado!!..jajajaja pues fui la unica que tuvo un cambio representativo en su vida, que chido!...Al final de cuentas se animaron y lo volvieron a organizar, en esta ocasion yo ya no quise participar, pues ya ni me interesa rojo o amarillo, no me hace falta ni amor ni dinero, jeje ni tampoco me hace falta que me regalen una tanga...no es por presumir ni ser aguafiestas pero ya tengo todo lo que necesito.
Y si lo tengo SE que no es producto de un calzón de tal o cual color, sino de las circunstancias apropiadas que se fueron dando, y además como alguien dijo por alli: Ya me tocaba!.. XD




Bueno, aqui les comparto algo mas sobre la tradición del intercambio de calzones, pues dicen que tiene mejor efecto cuando son regalados,  ( sí como no, je) y otros ritos que se siguen en diferentes paises para recibir el Año Nuevo.
Yo la verdad no creo en nada de eso, ni sigo ningún rito ni tradición al respecto, sostengo que a uno le va bien o mal por desición propia y nada mas, pero como la costumbre de echarle la culpa o responsabilizar a alguien mas de lo bueno o malo que nos pase, pues ahi está medio mundo siguiendo absurdas tradiciones, pero bueno...cada quien.

Entre la tradición general  está el de usar interiores, calzones, bragas, tangas, como quieran llamarlas, de color amarillo que deben ponerse 5 minutos antes de finalizar el año, es un rito de muchos tiempos atrás, tiene relación con el poder del sol, que para muchas culturas como la Inca y la Azteca, ha significado mucho, no solo por su imponente presencia o por el calor que les brindaba en días fríos, sino también por que estaban seguros que les brillaba el camino hacia la abundancia y que para nosotros en el tiempo actual, nos comunica alegría, prosperidad, esperanza y buenas energías.
Hay personas que manifiestan sobre la efectividad de usar ropa interior amarilla si se quiere fortuna y roja si lo que se busca es atraer al amor. Se considera que ambas son poderosos amuletos sin importar la calidad de la prenda.

La tradición de usar ropa interior amarilla viene de Asia y poco a poco se fue extendiendo a todas partes del mundo, lógicamente a latinoamérica, la idea era que al tener contacto íntimo con estas prendas, las cosas buenas que estamos esperando para el año siguiente se adhieran al cuerpo. Dicen que si esas prendas son obsequiadas por amigos o familiares, los resultados serán muy grandes, ya que vienen cargadas de buenos deseos de las personas que nos quieren.

La celebración del Año Nuevo es una de las más antiguas y universales de las festividades. Hace aproximadamente 4.000 años atrás, los babilonios fueron los primeros en convertir el Año Nuevo en un ciclo festivo que duraba 11 días y que se celebraba al comienzo de la primavera.

Los egipcios celebraban el fin del año con el comienzo de la crecida del río Nilo y la preparación de las tierras para la siembra, mientras que los romanos también hacían coincidir la celebración con la llegada de la primavera y lo festejaban el 25 de marzo.
Pero fue el emperador Julio César el que cambió la fecha al primero de enero, primer día del mes dedicado al Dios Jano. Esto fue confirmado en las adaptaciones que hizo el Papa Gregorio XIII, y es el calendario que rige en nuestros días.

Si quieres atraer la suerte al estilo escocés, recuerda que en Edimburgo se toman muy en serio el cambio de fecha. Durante cinco días -del 29 de diciembre al 2 de enero- celebran un festival conocido como "Hogmanay". Miles de personas participan en desfiles de antorchas, organizan juegos de luces y pirotecnia en el casco antiguo e inundan las calles de mercadillos y bailes celtas con Kilt. Además, en la noche del 31 se regalan whisky, un trozo de carbón y un bizcocho de pasas. Todo eso da buena suerte.




En Inglaterra en la noche del 31 de diciembre se cuentan los últimos diez segundos del año y cantan "Auld Lang Syne" mientras brindan con champán. Es una canción del siglo XVIII del poeta Robert Burns, que se utiliza para despedir el año, despedirse de alguien cuando emprende un largo viaje, o despedir a un difunto en su funeral. Su estribillo dice: "¿Deberían ser olvidados los viejos amigos y los viejos tiempos? Por los viejos tiempos, amigo mío, por los viejos tiempos. ¡Tomaremos una copa de afecto por los viejos tiempos!"

Los alemanes aprovechan la última noche del año para predecir el futuro. ¿Cómo lo hacen? De un modo original. Funden plomo a la luz de una vela. Una vez derretido en una cuchara lo vierten a una cazuela con agua; al entrar en contacto con ésta el plomo adquiere formas caprichosas. El plomo se vende con una lista de interpretaciones: los trozos parecidos a un puño son un corazón y garantizan buena suerte en el amor, las flores indican nuevas amistades. Es una tradición similar a la de leer los posos del café. Esta práctica adivinatoria ya era habitual en la época de los romanos, expertos en la fundición de metales.

Los Italianos aprovechan la Nochevieja para propiciar suerte en el amor con lencería sexy de color rojo, una tradición que también se sigue en España, pues es habitual que las tiendas aprovechen estos días para comercializar este tipo de lencería. Otra costumbre es que se deshacen de ropa y muebles viejos para dar cabida a lo nuevo, sobre todo en Nápoles y Roma, donde más de una vez han tenido que poner freno a través de normativas legales al ímpetu de lanzar trastos por la ventana. Para atraer suerte con el dinero comen lentejas en el último día del año. Ésta es otra tradición que tampoco resulta ajena a los españoles.

Los polacos se apuntan a algunas de las prácticas europeas en el ámbito del fetichismo festivo por Nochevieja. No sólo llevan ropa interior roja, además esconden en su monedero las escamas del pescado que cenan en Nochebuena para asegurar el éxito profesional el resto del año. Otra costumbre es intentar pagar todas las deudas y así encarar el año entrante libre de ataduras. Tampoco dudan de desprenderse de cosas viejas para dar cabida a todo lo nuevo en el nuevo año. Así, los últimos días del año se dedican a hacer una buena limpieza de armario.

En Francia la última noche del año si se besa a un desconocido (a) bajo un muérdago, se conseguirá esposo (a) en el siguiente año.

En Rusia por ejemplo, la cena del día último del año se conforma de lechón relleno de trigo negro o ganso relleno de manzana, además en la mesa generalmente se encuentran mandarinas que son sumamente apreciadas.

En Argentina , cabe destacar que Buenos Aires, vista desde el cielo, se convierte en una gran falla la noche del 31 de diciembre. A las once de la noche los vecinos de los barrios de Ensenada y Berisso queman los momos, muñecos de papel maché muy parecidos a los ninots valencianos. Es su manera de desprenderse de lo malo ocurrido y dar la bienvenida al nuevo año.

Comer una cucharada de las lentejas en Nochevieja es una tradición en Chile , donde también está extendido el uso de ropa interior de color amarillo para atraer el amor. Hay una práctica adivinatoria del año nuevo que consiste en cascar un huevo en un vaso de agua la medianoche del 31 de diciembre y al día siguiente se interpreta su forma. Si se parece a una iglesia es que habrá boda y si hay círculos, dinero o cambios en lo personal, dicen los salvadoreños.

Pasear o correr con maletas en Nochevieja no es una prueba de atletismo urbano. Se trata de un ritual para que el año nuevo traiga muchos viajes, muy extendido en Colombia y seguido también por venezolanos, panameños, paraguayos, peruanos, chilenos, salvadoreños y costarricenses. Y si al salir de casa con las valijas se da un portazo, mucho mejor: se alejarán los malos espíritus.

Otra forma de acabar con lo malo es someterlo al fuego purificador. Se queman muebles y ropas viejas en Perú, Honduras y Ecuador . Se escribe en papelitos lo indeseable y se introducen en un muñeco al que se prende fuego, como hacen los campesinos de Colombia.

Cierto o no, el asunto es estar en paz con uno mismo y renovar energías para estar listos para lo que venga.

Diana

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Publicado por Blogger para DIANA el 12/30/2010 01:44:00 PM

1 comentario:

  1. yo me puse unos amarillos por que amor ya tengo, pese a lo incrédulo que suelo ser siempre a fin de año suelo hacer ritos desde barrer hasta ponerme un calzón de color y me funciona una veces mas otras menos pero todo llega por que le toca a uno o por un rita quien sabe pero yo me divierto mucho con eso de los ritos de año nuevo.

    un abrazote y que tengas un 2013 igual de exitoso que el año anterior

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