ESMEGMA

La finalidad del esmegma es proteger al pene de enfermedades y bacterias, sin embargo, la desatención hacia la presencia del mismo provoca graves problemas.
Se trata un líquido sebáceo producido por las glándulas de Tyson o Littré, ubicadas en la unión entre el prepucio y el glande. Esta secreción se genera desde que el hombre nace y sus glándulas empiezan a funcionar. Además de contener sustancias antibacterianas permite la lubricación del glande, necesaria para que el prepucio se pueda deslizar o retraer con facilidad.

De acuerdo con el especialista, algunos varones producen más esmegma que otros. Esto se debe a que las glándulas que lo elaboran se hipertrofian (aumentan de tamaño), ya sea por falta de higiene o tras contraer una infección de tipo sexual. Incluso se llega a confundir al esmegma con tumores pequeños, papilomas o verrugas, que aparecen en toda la corona del pene como perlas blancas cuando la persona padece alguna enfermedad. Afortunadamente, en la mayoría de los casos no hay nada que temer, pero por cuestiones de estética, muchos caballeros inician un tratamiento de disminución o cauterización, para tener una mejor apariencia.

El esmegma se acumula con mayor facilidad en quienes no están circuncidados que en aquellos que les fue removido quirúrgicamente el prepucio. Por otro lado, existe un punto fundamental que se refiere al aseo personal, ya que un alarmante porcentaje de personas del sexo masculino suele ser descuidado en este sentido; el ejemplo más común, no secar su miembro cuando van al baño -lo cual deberían hacer en cada ocasión (circuncidados o no)-, o que a la hora de ducharse no lo laven bien.

Esto redunda en un exceso de esmegma en el área, que a su vez ocasiona -tanto en niños como en adultos- inflamación, comezón, aparición de granos enrojecidos y molestias al orinar; todo ello se acompaña de un olor desagradable, que a mayor edad se vuelve más penetrante y maloliente.
Asimismo, las infecciones pueden hacer su aparición;una de las más frecuentes es la llamada alanitis, que provoca la inflamación del glande. Y es que la humedad actúa como una especie de material de cultivo para los hongos y las bacterias, propiciando que se reproduzcan con mayor facilidad.

Hay que subrayar que no sólo los hombres se ven afectados por causa de la citada secreción. Si alguien tiene una infección en el prepucio, es fácil que la transmita a su compañera sexual. Este riesgo es todavía mayor en quienes han tenido relaciones con diferentes parejas.
Lo que aún está a discusión es si el esmegma llega a ser un factor que propicie la aparición de cáncer en el pene.

No se sabe con precisión, hay quienes afirman que puede puede provocar cambios celulares,
al favorecer al proceso de inflamación crónico, que en conjunto con la irritación hace que las células benignas cambien a malignas, sobre todo en las personas adultas, porque si no hay pulcritud pasan años y años guardando esas secreciones y es entonces cuando las células se transforman.

Las mujeres también cuentan con unas glándulas similares a las de Tyson o Littré, denominadas
de Bartolini. Se localizan en cada lado de los labios menores y dentro de los labios mayores y su función principal es la de proporcionar lubricación durante las relaciones sexuales.

Esta información me la fusilé de diferentes partes de la red, nomás para que sirva de breviario cultural, aunque me imagino que los hombres que pasan por aqui saben sobre esto y mucho mas. No pongo ilustraciones porque creo que todo mundo conocemos un pene circuncindado y otro con prepucio. Me encantan los circuncindados =P por estética y por que su limpieza es mas visible.