Posiblemente esta pintura no sea un verdadero objeto de arte, pero en las ultimas semanas adquirió una fama impresionante debido a su "restauración" y a la polemica, incluso burla, de la que ha sido objeto, pero indudablemente ha aumentado su valor y fama.
En el arte cristiano se denomina Ecce Homo una tipología de representaciones de Jesús en la que aparece tal como se describe en este pasaje evangélico, con o sin los demás personajes (Pilato, la multitud de judíos, soldados romanos o sayones). Cuando se representa, el entorno suele ser arquitectónico (un palacio o castillo). Cristo aparece semidesnudo y atado, con una caña en las manos (que representa un cetro, que sus torturadores le dieron en burla, por la misma razón que le despojaron de su túnica y le pusieron un manto regio, puesto que su presunto delito era pretender ser " rey de los judios" INRI).
La restauración del Ecce Homo por parte de la anciana de 80 años Cecilia Giménez ha sido considerada por muchos como el gran fallo cultural de los últimos tiempos. La señora, que se ofreció para restaurar la pintura en una iglesia en la localidad de Borja y que data de principios del siglo XIX, logró una transformación tal del rostro de Cristo, que varios especialistas dudan de que la obra pueda ser recuperable.
Sin embargo, el resultado de la restauración ha tenido tanto impacto en los medios y redes que, si bien muchos usan la figura surgida del pincel de la anciana como medio de burla, otros sugieren que la restauración debe quedarse así y no debe tocarse, que el nuevo cuadro representa un reflejo de la situación política y social de nuestro tiempo. La restauradora ha ganado cientos de fans en los últimos días y la institución religiosa donde se encuentra su trabajo ha recibido ya a miles de turistas para fotografiarse con el Ecce Homo restaurado.
Es cierto que el nuevo rostro de Cristo nada tiene que ver con el original, pero, si bien muchos critican a la anciana por la supuesta sencillez de su pintura, ¿no será realmente el producto de originales ideas de la restauradora?, ¿estaremos en presencia de un talento no descubierto hasta entonces? ¿el mensaje de Cecilia será realmente más profundo de lo que aparenta?
Al observar la restauración no se puede negar que la autora pudo haber transformado el más profundo realismo en el más moderno de los surrealismos. Recordemos que famosos maestros de la pintura como Pablo Picasso fueron tan grandes precisamente por la sencillez de su obra y por lo profundo de sus mensajes desde una panorámica surrealista.
De todos modos, aun no sabemos si la restauración del Cristo de Borja ha sido el gran fallo de una anciana en decadencia, o una obra de arte surgida de su gran talento y que no puede ser comprendida por la media.
Sea lo que sea, la imaginacion e ingenio de usuarios de todo el mundo no se ha dejado esperar y circulan diversas versiones de la ahora famosisima pintura.
En el arte cristiano se denomina Ecce Homo una tipología de representaciones de Jesús en la que aparece tal como se describe en este pasaje evangélico, con o sin los demás personajes (Pilato, la multitud de judíos, soldados romanos o sayones). Cuando se representa, el entorno suele ser arquitectónico (un palacio o castillo). Cristo aparece semidesnudo y atado, con una caña en las manos (que representa un cetro, que sus torturadores le dieron en burla, por la misma razón que le despojaron de su túnica y le pusieron un manto regio, puesto que su presunto delito era pretender ser " rey de los judios" INRI).
La restauración del Ecce Homo por parte de la anciana de 80 años Cecilia Giménez ha sido considerada por muchos como el gran fallo cultural de los últimos tiempos. La señora, que se ofreció para restaurar la pintura en una iglesia en la localidad de Borja y que data de principios del siglo XIX, logró una transformación tal del rostro de Cristo, que varios especialistas dudan de que la obra pueda ser recuperable.
Sin embargo, el resultado de la restauración ha tenido tanto impacto en los medios y redes que, si bien muchos usan la figura surgida del pincel de la anciana como medio de burla, otros sugieren que la restauración debe quedarse así y no debe tocarse, que el nuevo cuadro representa un reflejo de la situación política y social de nuestro tiempo. La restauradora ha ganado cientos de fans en los últimos días y la institución religiosa donde se encuentra su trabajo ha recibido ya a miles de turistas para fotografiarse con el Ecce Homo restaurado.
Es cierto que el nuevo rostro de Cristo nada tiene que ver con el original, pero, si bien muchos critican a la anciana por la supuesta sencillez de su pintura, ¿no será realmente el producto de originales ideas de la restauradora?, ¿estaremos en presencia de un talento no descubierto hasta entonces? ¿el mensaje de Cecilia será realmente más profundo de lo que aparenta?
Al observar la restauración no se puede negar que la autora pudo haber transformado el más profundo realismo en el más moderno de los surrealismos. Recordemos que famosos maestros de la pintura como Pablo Picasso fueron tan grandes precisamente por la sencillez de su obra y por lo profundo de sus mensajes desde una panorámica surrealista.
De todos modos, aun no sabemos si la restauración del Cristo de Borja ha sido el gran fallo de una anciana en decadencia, o una obra de arte surgida de su gran talento y que no puede ser comprendida por la media.
Sea lo que sea, la imaginacion e ingenio de usuarios de todo el mundo no se ha dejado esperar y circulan diversas versiones de la ahora famosisima pintura.
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